El castigo de la perra díscola
La perra había sido mala con su Amo y por lo tanto este
había estado pensando en el castigo perfecto, ideal para ella por su
comportamiento y sus faltas, para q ese castigo la hiciera reflexionar y así
aprender de ello.
La intención de ese castigo era q a partir de ese momento en
el q se aplicara, se sufriera un cambio radical en el comportamiento de la
perra rebelde y díscola la cual parecía q disfrutaba haciendo enfadar a su Amo.
La llamo por teléfono, quedando con ella en una hora y un
lugar determinado, El pasaría por allí para recogerla, la perra solo debía
esperar y acudir en las condiciones q le había indicado su Dueño.
Esas indicaciones en especial eran en la forma de
presentarse vestida ante el, lo único q podía llevar solo de ropa era, unas
medias negras con liguero, zapatos y una chaqueta-cazadora q tapara su cuerpo
hasta por encima de las rodillas. La chaqueta solo taparía su cuerpo desnudo,
sus pechos, culo y su coño totalmente depilados por eso seria lo
suficientemente larga para no dejar ver sus partes intimas desnudas pero lo
suficientemente corto para poder dar lugar a la imaginación…
La perra se quedo perpleja al oír esas indicaciones pero las
cumplió tal y como El la dijo, sabia q estaba enfadado y q iba a recibir un
castigo ya q así se lo había anunciado, lo q no sabia lo q la esperaba y por lo
tanto no quería agravar mas la situación.
Estaba anocheciendo, empezaba a refrescar en la calle, la
perra ya llevaba 10 min. esperando a su Amo, estaba retrasándose aposta, quería
mantenerla un tiempo en la calle esperando, aunque El se encontraba cerca
observándola. Ella estaba inquieta, se sentía desnuda no solo físicamente como
estaba aunque la tapara la chaqueta también por dentro, en su interior, ya q se
le pasaba por la cabeza q la gente podía saber o imaginarse q estaba desnuda
ahí esperando y podrían pensar de ella q era una puta cualquiera.
Ya habían pasado 15 min. cuando un coche se para justo
enfrente de esa perra, bajan la ventanilla y la llaman, si es su Amo, ya ha
llegado, pero no baja del coche.. por lo q la perra se pregunta, ¿A dónde vamos
sino baja del coche? ¿Qué va a ser de mí?. Sin pensárselo acude a la llamada y
sube al coche, en esto q después de ponerse el cinturón de seguridad, El coge y
le desabrocha la chaqueta dejándola así entreabierta mostrando las vistas del
cuerpo desnudo. Estas perfecta y muy zorra como lo q eres, le dice el Amo a la
perra a la vez q esta se ruboriza y no sabe donde meterse, pensando en tierra
trágame!! La mirada de la perra es perdida, no se atreve a levantarla del suelo
del coche, las manos las tiene con la palma hacia arriba encima de sus piernas
sin atreverse a moverse, se ha quedado completamente estática en el asiento.
Comienza el coche a moverse en dirección de su destino,
cuando están próximos a llegar, el Amo coge la cabeza de la perra llevándola
hacia su paquete y diciéndola q ya sabe lo q tiene q hacer. Esta baja la
cremallera del pantalón de su Amo y con los dientes aparta el boxes y saca así
su polla para comenzar a mamarsela.
El coche ya se ha parado, pero no ha dado tiempo a q haya
hecho correr a su Amo por lo tanto no deja de hacer lo q estaba haciendo hasta
q lo consigue, ya q sabe q no puede dejar una tarea a medias y menos dejar a su
Amo insatisfecho.
La levanta la cabeza y la ordena quitarse la chaqueta, salir
del coche y quedarse al lado arrodillada hasta q El se acerque a ella, para
ponerla un collar con una correa y llevarla así a cuatro patas, desde el garaje
donde se encuentran en ese momento hasta la mazmorra q tienen disponible toda
la noche para ellos solos.
Tras entrar en esa habitación, oscura, fría, llena de
elementos, aparatos de tortura (aunque en realidad en ellos se disfrute por
ambas partes), se escucha la voz del Amo diciendo a su perra q desde ese
momento, empieza su castigo, su correccional, q no podrá hablar ni hacer nada
sin su permiso y para poder hablar o pedir algo tendrá q decir una palabra
clave, la cual será “zorra”, palabra q mientras se la estaba indicando el Amo
como palabra clave, se la estaba escribiendo en la frente.
La perra rebelde se quedo tan dócil como un corderito
asintiendo con la cabeza y a los pies de su Amo. Seguramente se la pasaban
muchas cosas por la cabeza, pero era incapaz de actuar o mencionar palabra, era
como si el miedo se la hubiera apoderado de su cuerpo o simplemente se daba
cuenta de q no iba a ser como otras veces, q realmente estaba enfadado y no iba
a ser un juego de niños lo q esa noche la esperaba.
Lo primero q hizo el Amo fue quitarla los zapatos para
colocarla unas botas especiales, eran patas de caballo, además la coloco un
plug anal del cual salía una larga cola de caballo. En las manos también la
coloco unos guantes con patas de caballo también y en la cabeza un bozal de
caballo, si la había convertido en un caballo, una ponygirl, lo q la hacia
sentir a ella mas sucia y guarra, ya q eso la humillaba, se veía y sentía como
un animal, q esa era la idea al colocarla todo eso.
En otras ocasiones, en la soledad de su casa, ella por orden
de su Amo, había visto videos de perras caminando como caballos y tratadas como
tal, pero no se había imaginado nunca q podría llegar a estar en esa situación
como lo estaba ahora. No daba crédito a lo q la estaba pasando y aun estaba en
proceso de asimilación cuando noto un fustazo en un cachete de su culo, a lo
cual el acto reflejo fue moverse hacia delante, como queriendo escapar. Casi
seguido recibió otro en el otro cachete, intento protestar pero no podía
gesticular palabra solo algún sonido de animal le salía a través del bozal, y
ya empezaron mas continuos y fuertes los fustazos hasta q la pony comprendió q
tenia q hacer lo q había visto en esos videos, caminar como un caballo,
levantando las piernas y con los patas delanteras moviéndolas como efecto
rebote de sus piernas.
Después de dar un par de vueltas a la habitación, tirandola
de la correa la hizo ponerse a cuatro patas, se sentó encima de ella a modo de
jinete y con la fusta la volvió a azotar para q se volviera a poner en
movimiento llevando a su Amo así hacia la pared justo en el centro de la pared
había un trono para q El tomara aposentos. La hizo un gesto para q se tumbara
sobre sus piernas, dejando así su culo a su disposición, culo q ya estaba
enrojecido por los justazos.
-
Veamos lo q tenemos aquí… aparte de una puta patética y
ridícula q parece q ya se le ha ido toda la rebeldía q tenia días atrás…
La perra asintió con la cabeza y coloco sus manos en su
nuca, dejando caer su cuerpo sobre las piernas de su Amo. El empezó a
inspeccionar el cuerpo de la perra convertida ahora en caballo… estaba
brillante a los ojos de el. Podía sentir su cuerpo temblar posiblemente de
excitación, humillación e ignorancia de lo q la iba a esperar. La piel de su
culo desprendía calor por los azotes y el enrojecimiento. Y su coño estaba tan
mojado como un río y bien caliente tanto o mas q el calor q desprendía su culo.
En esa posición la coloco un par de pinzas en cada labio del
coño con un peso cada una e incorporándola un poco lo mismo en cada pezón, la
volvió a reafirmar en sus piernas y con una paleta de madera comenzó a azotar
su dolorido y enrojecido ya culo. La perra no hacia mas q retorcerse, intentar
escapar, y gesticular palabras, todo era en vano, inútil, en cada muestra de
rechazo a esos azotes el próximo aun era mas fuerte q el anterior, hasta q al
final dejo de luchar contra ellos y recibirlos sin ninguna resistencia. La
tortura era mayor q otras veces q unos simples azotes, por el hecho de q ya
tenia el culo sensible y dolorido y además en cada movimiento producido por el
mismo azote se movían esos pesos estirando así un poco cada vez sus labios
vaginales.
Después de un innumerable numero de azotes, el Amo se
levanto llevando a la perra con la cadena hasta el centro de la habitación,
donde ahí la despojo del atuendo de pony para taparla los ojos y colocarle en
la boca un abrebocas.
A continuación, llamaron a la puerta, el Amo se apresuro a
abrirla y en ese momento entro alguien en la habitación. Era una voz femenina
lo q se escucho y unos tacones q se acercaban al centro de la habitación, donde
estaba la perra quieta preguntándose q pasaba, quien había entrado, q hacia ahí
esa mujer, porque la había dicho a su Amo q preciosa la zorra q tenia pero q
mas bonita iba a estar enseguida. La mujer cogió papel film y cinta americana y
con ayuda del Amo, comenzaron a envolverla con el papel, dejándola totalmente
inmovilizada, momificada. Ambos entre risas comentaron al terminar el trabajo q
había quedado perfecta, ideal para posar en fotos, pero sobre todo para poder
manosearla y usarla a su antojo.
Entre los dos tumbaron a la perra boca arriba en una mesa de
madera, al llevar el abrebocas quedo la boca destapada, al igual q los
orificios de la nariz para q no tuviera problemas de respiración. La mujer
escupió dentro de la boca de ella y luego el Amo, a la vez el Amo iba tocando
sus pechos desnudos por encima del papel y la mujer q era Dominante también, la
tocaba el coño y abriendo un poco el papel con sus dedos para meterla los dedos
dentro de su coño. En eso q el Amo la mete por el orificio de la boca un
vibrador a la perra, mientras la Ama se había subido encima de la perra y
haciéndose hueco entre el papel y el coño de la perra la fue penetrando con el
dildo del arnés q llevaba colocado. Habían sido pocos minutos los q había
pasado la perra momificada pero para ella había sido una eternidad, después de
10 min. comenzaron a quitarla toda la envoltura pellizcando sus pechos, nalgas,
estomago… aunque era difícil pellizcar, se escapaban los dedos ya q todo su
cuerpo estaba sudoroso por el calor del plástico.
La perra se sentía tan humillada q ni se atrevía a decir la
palabra de seguridad para poder pedir clemencia, o hacer una de las miles de
preguntas q se la pasaban por la cabeza o simplemente agradecer lo q estaba
viviendo, ese castigo. Ahora mismo estaba perpleja, desorientada, un simple
animal con el divertirse y hacer lo q quieran con ese animal, ya q estaba
indefensa, desnuda, arrastrada pero a la vez muy encelada, caliente, cachonda
como una cerda.
2ª Parte
El castigo en ese mismo momento no había hecho mas q
empezar, aunque a la perra la se la estuviera haciendo larguísimo y por su
cabeza se la pasaba la absurda idea de q había llegado al intermedio de ese
castigo, q en breves terminaría esa pesadilla para ella pero eso no era así,
aun había muchas sorpresas q la esperaban.
Sin tiempo para poder asimilar las cosas, cuando empezaba a
disfrutar las sensaciones extrañas y nuevas para ella, los sentimientos y
pensamientos, le surgían mas vivencias para asimilar, mas ganas de ponerse a
llorar y echar a correr para así poder liberarse de esa tortura, aunque en el
fondo eso era impensable para la perra ya q no se atrevía ni a levantar la
mirada del suelo.
En este mismo momento, la habían dado unos minutos de
respiro a la perra, mientras ellos dos hablaban en un rincón algo apartados de
ella. Esta intentaba escuchar lo q decían pero era imposible, aparte q su mente
tampoco la dejaba porque se la venían todo el rato las imágenes de lo q estaba
viviendo y las miles de preguntas y protestas q tenia por hacer.
Dejaron de hablar, se acercaron a la perra, y el Amo cogió
la correa dándosela así a la mujer para q la llevara ella de su mano. Esa gran
mujer q había ayudado a la momificación de la perra, con gusto cogió la correa
y la llevo hacia una parte de la habitación donde había una especie de potro,
pero era diferente a otros potros, este contenía como un taladro mecánico con
la punta de dildo.
La colocaron atada en el potro, introduciendo el dildo de la
maquina en su coño, a la vez la Domina se coloco de tal manera q pudo acceder
con su arnés en el culo de la perra, metiéndoselo de golpe y sin previo aviso
por el culo de esa puta rebelde a la q estaban castigando. El Amo conecto el
dildo del potro antes de q el le quitara el abrebocas q aun tenia la perra en
la boca para poder meter así su polla. No habían dejado ni un agujero libre de
ella, estaba totalmente llena y penetrada por todos ellos a la vez q era
embestida con fuerza.
Eso era muy denigrante para la pobre perra, ya ni se sentía
como un animal, sino como un objeto al q tapar sus agujeros o llenar con cosas,
un objeto al q usar para disfrute de otros. Por lo q empezó a comprender q su
Amo había tenido mucha paciencia con ella, tratándola acorde a su condición a
lo q ella era, pero por ser desagradecida y provocar esos enfados, con su
rebeldía había conseguido q la tratara de forma tan denigrante q daba la
sensación de q no valía nada, de q no merecía ser tratada con respeto, ni q su Amo mostrara el mas mínimo interés
por ella.
Claro esta, eso no era así, ya q para su Amo ella seguía
siendo alguien importante, a quien cuidar y mimar, tratar con el respeto q
merece, como su perra, aunque la usara y humillara a su antojo, eso no la
quitaba el gran valor q tenia para su Amo, pero si q quería q su perra viera lo
q la podía pasar sino cambiaba. Si seguía tratando sin respeto a su Amo, sin
ser agradecida con El y haciendo lo q ella siempre quisiera, iba a acabar sola,
desvalida, sin nadie a quien hacer feliz con su cuerpo y sus servicios.
Volviendo a la escena en cuestión en la q nos encontrábamos,
la perra estaba tan encelada q la era imposible contenerse mas y aun sin
permiso de nadie no pudo evitar el correrse. Acción q fue penalizada como era
de esperar, ya q ninguno de los dos q la estaban poseyendo la habían dado
permiso para hacerlo y eso era considerado como un desafió a quienes la estaban
poseyendo.
El Amo la explicaba a la perra q como había vuelto a actuar
por su cuenta, corriéndose sin q la dieran permiso, ahora iba a dar ella placer
a la Domina antes de q esta se fuera, ya q no iba a tardar mucho en hacerla. La
sacaron la polla de la boca y el dildo de la mujer del culo y mientras la mujer
se quitaba el arnés y se colocaba delante de la perra, el Amo fue a por un par
de velas para encenderlas.
La Domina se coloco de tal manera q puso su coño justo en la
boca de la perra dándola una orden firme y clara, q comenzara a lamer hasta q
la hiciera gozar y correrse, quería ver lo q era capaz de hacer esa puta perra,
si era tan buena como parecía con su lengua con un coño al igual q lo era con
una polla.
Estaba totalmente metida en su cometido, lamiendo sin cesar
cuando el Amo empezó a verter sobre su cuerpo la cera de las velas, lo q hizo q
la perra se quedara parada, soltando algún quejido q otro. La Domina alargo su
brazo para cogerla del pelo, darla un par de hostias en la cara y acercar su
cara de nuevo a su coño, ordenándola q no parara pasara lo q pasara o lo iba a
lamentar.
- ¡Oh, Siiiiii! Son las palabras q se escucharon de la Domina,
la cual había llegado al éxtasis, gracias a esa lengua de aquella perra q cada
vez era menos rebelde y mas dócil. La mujer la agradeció q la diera ese placer
con su lengua, besándola en la boca a la vez q acariciaba su cabeza como a una
dulce perra. Después de arreglarse la mujer se despidió de su Amo y salio de la
habitación diciendo a la perra q no la defraudara y diera todo lo q tenia q dar
por y para su Amo.
Ya estaban de nuevo los dos solos, el Amo la saco del potro,
la pregunto si tenia algo q decir, ya q veía en sus ojos medio llorosos, q
tenia algo q decir, además de ver una mirada cansada pero deseosa de mas. La
perra se decía para si misma, en su mente, claro q tengo algo q decir, pero si
lo digo, posiblemente le haré mas enfadar o puede pensar q es una ofensa para
el, q hago, digo lo primero q se me pasa por la mente, lo q realmente siento,
parte de lo q tengo q decir, no digo nada… ahora esa era la duda si hablar o no
hablar.
El Amo volvió a preguntar dándola la ultima oportunidad de
hablar antes de seguir con el castigo, comentando q si tanto tenia q decir q se
había quedado callada pensando o es q no había nada q comentar.
Ella quería decirle q volviera a llamar a esa mujer, q
porque se tenia q haber ido y no terminado el castigo con ellos pero sabia q
eso le iba a enfurecer si el podía ver en esas palabras q ella había quedado
totalmente hipnotizada por esa mujer, q no la importaría ponerse a sus pies,
estaba como hechizada por aquella mujer. La perra solo contesto q gracias por
la lección q le estaba dando y q estaba tan impactada por todo lo q estaba
sucediendo q aun no estaba asimilando las cosas y no podía decirle nada mas por
el momento, solo q algo estaba cambiando en su interior y q se encontraba algo
cansada.
Su Amo ya sabia q estaba algo cansada, se lo había visto en
la mirada, por eso lo q venia ahora era ese descanso, ese intermedio del
castigo, q la perra pensaba hace un rato q había llegado. La cogió y la ato de
manos a unos grilletes q colgaban de una cadena del techo. La perra se dejo
medio caer al colgarla ahí ya no tenia fuerzas ni para sostenerse de pie por si
sola y aprovecho el estar colgada para dejarse caer un poco. Sin esperárselo
comenzó a escuchar caer agua en el suelo, además del frescor q producía esa
agua, cuando el Amo comprobó q estaba a la temperatura q el creía idónea
comenzó a darla agua a la perra con una manguera, la idea era además de
limpiarla un poco el sudor y flujos, el refrescar su cuerpo y a la vez q eso la
aliviara y así dejar su cuerpo mas descansado, q notara alivio para poder
continuar con el castigo.
Termino de lavarla, la bajo de las cadenas ordenándola q se
pusiera a cuatro patas y esperara ahí quieta unos minutos hasta q se fuera
secando un poco por si sola. Ya tan apenas quedaban gotas de agua en su cuerpo
cuando el Amo se acerco, y cogiendo la correa de la perra la dio unos tirones
de ella para q lo siguiera, iban a dar una vuelta por los alrededores del
edificio donde se encontraban. Estaba apartado de la civilización, rodeado de
vegetación, como una casita de campo, por lo q no había nadie y mas a esas
horas de la noche ya.
La perra iba desnuda tan sola con el collar y la correa,
tampoco importaba mucho no había nadie y aunque hubiera habido alguien por los
alrededores, serian usuarios de las demás mazmorras por lo q no se iban a
escandalizar de ver esa imagen. La acerco a un árbol y susurrándola al oído su
Amo la dijo estas palabras: “Si tienes q hacer alguna de tus necesidades, es tu
momento, hazlo aquí en este árbol”. La perra se quedo estupefacta, parada,
había escuchado bien se preguntaba así misma. Pero la verdad es q si q tenia q
hacer algo, tenia muchas ganas de orinar, por lo q sin decir palabra ni tan
siquiera para preguntar como debía de hacerlo, levanto un poco la pierna, como
una perra de verdad y se dispuso a mear en aquel árbol.
Cuando termino, dieron una vuelta más por los alrededores,
parándose cerca del edificio, pero medio escondidos, por si pasaba alguien,
para q tuvieran cierta intimidad. El Amo se sentó en el césped, haciendo su
perra un gesto con la mano en el suelo al lado suyo para q se tumbara ella
también ahí. En esos momentos con unas toallitas húmedas, el Amo limpio a su
perra lo q pudo quedar o salpicar después de haber meado en el árbol y comenzó
a sobarla a la vez q iba besando y pellizcando ese cuerpo desnudo.
Quería q su perra descansara un poco, pero q a la vez se
sintiera querida y tranquila, dándola a entender q lo estaba haciendo muy bien
y q se sentía orgulloso de ella, ánimos para q siguiera aguantando pero sobre
todo lo q ese Amo quería también, es q se volviera a poner su perra tan
caliente q fuera dejando gotitas de sus flujos de camino a la mazmorra.
De vuelta ya en la mazmorra, el Amo la hizo saber q ya
quedaba poco de su castigo y q al finalizar la dejaría descansar pero cuando
estuviera recuperada del todo quería q le dijera todo lo q había pensado,
sentido durante el castigo y seria el momento de demostrar q había surgido
efecto y no un castigo en vano.
3ª Parte
Después de la tortura tanto física como mentalmente, esa
humillación y a la vez la calma q la acababa de dar su Amo antes de volver a la
mazmorra, llegaba el momento mas placentero del castigo para ambos; aquí no
solo iba a disfrutar el Amo sino q también la perra tendría su recompensa y su
disfrute.
Así la perra comprenderá q no es todo castigo, pero q hay q
trabajar duro para satisfacer a esa persona y q si necesita un correctivo lo
tendrá como ha estado viviendo en toda la sesión, q es lo q había empezado a
comprender la perra al dejar esa rebeldía y comportarse desde el primer momento
dócilmente.
Ella misma se estaba dando cuenta q algo estaba cambiando
dentro de ella, q ni se atrevía a rechistar, sino todo lo contrario, lo recibía
con lagrimas pero con orgullo y a pesar de haberse quedado descolocada con la
visita a mitad castigo, la había sabido a poco, la hubiera gustado continuar
con esa mujer y se estaba planteando si le decía a su Amo o no, q quería volver
a ver a esa mujer, q se había quedado totalmente rendida a los encantos de esa
mujer.
Al entrar en la mazmorra de nuevo, el Amo había dejado la
correa de la perra colgada de una percha q se encontraba en la puerta, así
dejaba aparcara al lado de la puerta a su perra, mientras El preparaba algunas
cosas. Ella se quedo sentada como una perra a expensas de q su Amo la dijera
algo o la moviera de allí y a la vez curiosa observaba lo q El hacia.
El Amo colocó en una esquina de la habitación, dos cuencos
de perro, uno con agua y otro con un poco de comida, lo q la perra no sabia, q
esa comida eran restos de lo q su Amo había comido al medio día, mas tarde El
se lo diría, para q así ella se sintiera mas humillada de saber q comía las
sobras.
Después de dejar todo en su sitio, se acerco para
descolgarla de la percha y llevarla hacia esa esquina ordenándola q comiera y
bebiera un poco para reponer energías antes de continuar, mientras tanto El se sirvió
una copa de vino y se aposento en el sillón a beber de la copa mientras
observaba a su perra como devoraba la comida y la bebida, sin usar las manos,
tan solo con su boca, como una autentica perra.
Cuando la perra termino de comer, el la hizo un gesto para q
se acercara a donde el se encontraba. Allí es donde el Amo la indico q en la
mesa del otro lado de la habitación donde estaba el vino del q se había servido
la copa, había también comida, la cual debía de acercar y servir sobre su
cuerpo a modo de mesa a su Dueño, pero no solo eso, sino rellenarle y dejar
cerca de El la botella de vino. Así hizo la perra, a cuatro patas sosteniendo
sobre su lomo la cena para su Amo, hasta q el término y retiro todo de encima
de ella para poder poner así sobre ella sus pies y descansar un poco.
Mientras estaba en esa postura descansando, la iba diciendo
q todo lo q había pasado esa noche, era por su bien, quería q fuera la mejor
perra de todas las perras y era una lección q tenia q aprender, ya q había sido
demasiado osada y eso no podía ser así. Las palabras de su Amo iban calando
dentro del alma de la perra mientras ella misma iba asintiendo con la cabeza
sin darse tan apenas cuenta. Comenzaba a asumir lo q había pasado y el porque
del castigo, viendo q sus actos anteriores habían dejado mucho q desear y era
ahora cuando se estaba convirtiendo en una nueva perra.
Paso un buen rato cuando de una patada la retiro de su lado,
fue tan fuerte y de improviso q no se lo esperaba q la perra llego a
tambalearse. Se levanto del sillón y fue
a por la cola de perra para metérsela en el ano y un bozal pero un bozal
especial, era una mascara de perro la cual también se la coloco. Ella pensaba q
estaba ridícula, patética así, pero la verdad es q estaba muy graciosa y bella
a la vista de su Amo y de cualquiera q en ese momento la hubiera visto así. La
mascara impedía q pudiera hablar y al principio incluso ver, ya q los ojos
estaban cerrados por unas cremalleras q luego mas tarde abriría su Amo para q
pudiera ver la escena reflejada en un espejo, pero por el momento permanecería
así. Tras unos segundos de calma, sintió las manos de su Amo q se movían por todo
su cuerpo deteniéndose en su coño, el cual introdujo un par de dedos y después
de varios segundos moviéndolos dentro el, la introdujo unas bolas chinas.
Estaba tan caliente la perra q esas bolas entraron sin
ninguna dificultad y la humedad bajaba por sus piernas, la misma excitación era
producida por la humillación q seguramente estaba sintiendo y por el
desconocimiento de lo q iba a pasar.
Mediante fustazos su Amo la fue moviendo por la habitación,
ella seguía a ciegas por lo q andaba con miedo despacio a pesar de recibir los
azotes y sabiendo q aun a ciegas así la iba guiando su Dueño. Los fustazos
dejaron de llegar, señal de q se tenia q parar y q había llegado al sitio q El
quería aunque ella estuviera desconcertada y desorientada ya q no podía ver en
q lado de la habitación se encontraba, había perdido totalmente el sentido de
la orientación.
En ese momento, era ya tal excitación q simplemente con mas
fustazos se hubiera corrido sola sin necesidad de q la montaran como a una
perra. El Amo la destapo los ojos para q ahora pudiera ver y disfrutar, llegaba
el final de esa tortura. Estaba justo en frente de un espejo, pero justo
delante tenia un aparato, como un mini potro bajo, en el cual la ato ahí de pies y manos y la
saco la cola de su culo.
Era el momento en el q su Amo la iba a montar como a una
perra, empalándola con su polla, penetrándola por ambos orificios. La mirada de
la perra estaba fija en el espejo, estaba colocado ahí para eso, para q ella se
viera en el, para q pudiera ver a esa perra como era montada por la persona a
la q debía servir y adorar.
Justo en el momento en q su Amo iba a llegar al final, es
cuando la dio permiso a la perra para q ella también llegara y así llegar los
dos a la vez.
Los dos estaban ya desfallecidos, por lo q después de
terminar, desatar ala perra y despojarla de la mascara, ambos se quedaron
recostados sobre una manta cálida en el suelo, abrazados y así descansar antes
de asearse un poco y salir de allí para volver a sus casas.
Fin.
By nereida.
Pensamientos después del castigo
Llego el momento de la reflexión para la perra después de
haber recibido su castigo y haber pasado ya unas horas, días, para descansar y
poder reflexionar sobre todo lo q había vivido en esa mazmorra. Sabia q su Amo
la iba a preguntar y quería saber todo lo q pensaba, sus sensaciones, sus
reacciones, las conclusiones q ella había sacado de todo ello, por lo q llegaba
el instante de plasmar eso en su diario, para q luego su Dueño pudiera leerlo y
así comprender como se sentía su perra y ver si había sido efectivo o no ese
castigo.
Ahora se la planteaban unas cuantas cuestiones y lo más
difícil la forma de decírselo a su Amo. Recordar todo lo vivido no era
complicado ya q desde esa noche no había dejado de tener clips de imágenes como
si fueran diapositivas de una película de todo lo sucedido pero no solo eran
esas imágenes sino q aun permanecía en su piel en su interior todas esas
sensaciones.
Esa tarde noche la
recuerdo de una manera muy especial, desde el primer momento en el q recibí la
orden de acudir a la cita con mi Amo y la forma a la cual debía de acudir.
Cuando me dijo q tenia q ir sin tan apenas ropa, prácticamente desnuda, solo
cubierta con una chaqueta q cubriera lo justo de mi cuerpo, me dieron ganas de
responderle q no iba a hacerlo, q no iba a acudir así, era como si quisiera
escapar de esa situación pero tampoco quería escapar porque no quería
defraudarle, pero no me veía con fuerzas para ello. A pesar de eso, me arme de
valor, tome aire y me dije a mi misma, tu puedes con todo lo q te propongas, no
tiene porque salir nada mal y si te ha dicho q vayas así, El habrá tenido en
cuenta todos los factores y lo habrá visto factible.
He de reconocer q
hasta q lo ví aparecer y me metí en el coche, estaba echa un mar de nervios y
de dudas, quería huir, llorar, no se muy bien el q era lo q deseaba solo q
pasara pronto el tiempo y llegara cuanto antes a por mi. Ya en el coche me sentí
mas tranquila aun sin saber lo q me esperaba ni a donde íbamos, pero estaba el
para protegerme o eso creía yo y por lo tanto eso me tranquilizaba.
Desde ese momento
hasta el momento en el q me dejo en medio de la habitación totalmente aislada
ya q no podía ver lo q iba a suceder estaba mas o menos cómoda, tranquila, era
un castigo, me estaban humillando, torturando pero todo entraba dentro de lo
normal y acorde a mi condición y situación, aunque no me agradara mucho lo q sucedía,
un castigo no debe de agradar sino es mas bien un regalo q un castigo.
Lo peor llego cuando oí
la puerta y una voz extraña q no conocía, entonces pensé, ¿me va a ceder a
alguien? Pero luego pensé… no será capaz de ello… entonces ha traído a alguien
para q observe lo q hace conmigo y así q a mi me humille mas y me sea mas
difícil de llevar mi castigo. Si!! Será eso, ha traído a alguien para exhibirme
sentí un breve alivio dentro de lo malo era mejor q cederme a alguien, pero ese
alivio duro poco cuando ví q esa persona participaba y le ayudaba.
Lo q nunca pude
imaginar es q esa persona llegara tan adentro de mi y aun a pesar de q estaba
participando en mi castigo y para mi eso era lo peor, ya q no quería q mi Amo
me compartiera, ni nadie q no fuera El me tocara, deseaba q esa persona se
quedara, q no se fuera, quien me lo iba a decir!!
Eso me preocupo, el
deseo de q otra persona permaneciera con nosotros en la implantación de mi
castigo, era algo q no podía permitir en mi cabeza ni en mi interior, era
contrario a mi. Además pensaba para mis adentros, como puede ser q esa mujer
haya despertado en mi ese deseo, de dejarla participar en mi castigo pero sobre
todo el no querer q se fuera, el servirla también a Ella, me planteaba si era
traicionar a mi Amo o no por el hecho simple de q solo fuera una forma mas de
humillación y una nueva experiencia q no quería q se acabara tan pronto.
Pero en el momento en
q Ella se despidió y abandono la mazmorra… no podía dejar de pensar en Ella, mi
cabeza se dividía en dos, en lo q estaba viviendo q era la continuación de mi
castigo y mi Amo y la mujer q me había dejado anonadada. Es mas en ese momento
me plantee en haberle dicho a mi Amo q no quería q se fuera tan pronto q me
hubiera gustado q hubiera terminado la sesión con Ella, pero no tuve ese valor.
Ahora q han pasado
muchas horas de ese momento y he reunido ese valor, lo digo, me dejo tan
impactada q hubiera deseado q finalizara el castigo con nosotros, pero sobre
todo, aun la deseaba. No había podido olvidarla, quería repetir la experiencia
con esa mujer pero ampliando esa experiencia, mas tiempo y mas cosas para hacer
con Ella, puedo decir q deseo ponerme a sus servicios y poder adorar esa bella
mujer, respirar de su aroma y satisfacer sus deseos mas oscuros.
Por eso le quiero
decir mi Amo, q esa mujer toco alguna fibra de mi interior q yo misma desconocía,
fibra q hace q no la haya podido olvidar y quiera volver a verla. Mis
sentimientos están confusos, no se si la deseo a Ella o a Usted, mi Amo, no
quiero q se lo tome a mal, solo q me ayude a aclararlos y se q es mucho pedir,
pero creo q la mejor manera de ello seria q me cediera a Ella una vez mas para
poder ver en mi interior lo q realmente deseo. Si realmente la deseo a Ella, le
pediría mi libertad, si realmente le deseo a Usted, estaré a su servicio de por
vida, ya q nadie podrá hacer q quiera dejar de ser suya.
El castigo tenia una
finalidad, q dejara a un lado mi rebeldía y me volviera dócil, q dejara mis
arrebatos y le tuviera el respeto q merece, complaciéndole y obedeciéndole sin
rechistar a sus ordenes y deseos, y esa finalidad creo q se ha conseguido, ya q
ahora no veo el momento de revelarme contra Usted. Pero ha habido una pequeña o
grande según se mire complicación, y eso son las dudas de mis sentimientos, las
dudas q me ha planteado esa mujer a la q no me importaría servir y estar bajo
su dominio.
Eso no quiere decir q
ya no quiera ser suya, porque sigo queriendo estar a sus pies y me sigo
sintiendo suya, pero también tengo el deseo de estar con esa mujer, e incluso
me he planteado el poder pertenecer a ambos, y Usted siempre estaría en primer
lugar, con Ella solo estaría con su permiso y con las condiciones q Usted
quisiera, aunque no se si accederían a ello por eso comente antes lo de mi
libertad.
Sufrí gran humillación
en el castigo, dolor físico y agotamiento tanto físico como mental, pero
también tuve placer y una importante lección, cual es mi lugar y cual debe de
ser mi forma de comportarme. Que siempre velara por mi bien estar y si me
comporto como debo recibiré mi recompensa, ambos la tendremos, esa satisfacción
de disfrutar y de hacer bien las cosas los dos juntos.
Mientras el Amo iba leyendo el diario de su perra, su cara
iba cambiando de expresiones por momentos, al terminar todo lo q había escrito,
se le había quedado la cara q parecía un poema. No se esperaba q su perra
hubiera escrito eso y mucho menos deseara lo q le puso, estaba alucinado y algo
enfurecido de haber contado con su amiga para q participara en ese castigo.
Pensándolo fríamente el Amo vio q era mejor q hubiera pasado
ahora y con su amiga a q hubiera sido de otra manera, de todos modos, no quería
decir nada, solo q esa experiencia había dejado impactada a su perra, era
comprensible y normal fue una noche de muchas sensaciones y experiencias
nuevas, lo q podía dejar impactado y descolocado a cualquiera q hubiera estado
en la misma situación de la perra, incluso a el mismo.
Por otro lado, la idea de poder contar con su amiga, para
mas juegos o q ambos la pudieran dominar era algo q le llamaba la atención,
aunque su perra de un principio hubiera pensado q era imposible esa situación q
El no querría, pero no era así, porque no puede ser si los tres tenemos las
cosas claras? Era algo q el Amo se preguntaba para si mientras se planteaba esa
posibilidad, seria una buena forma de enseñar nuevos valores a su perra, de q
una mujer diera su toque en la educación de su perra, para así hacerla mas
perra aun de lo q era.
Después de unos minutos de silencio, mientras pensaba en
todo ello, le comunico a su perra, q aceptaba el q estuviera una vez mas con su
amiga pero q no le iba a dar la libertad si finalmente la gustaba estar con esa
mujer, sino q debería de servir a ambos, pero por encima de todo, el poder
sobre ella lo seguiría teniendo El, no dejaría de ser su posesión, solo q ahora
tendría a alguien mas q servir sobre todo si El no se encontraba disponible por
alguna circunstancia de trabajo, viajes…
La perra no se esperaba esa reacción y mucho menos q le
planteara eso, si ella lo puso en reflexión como opción pero no veía capaz a su
Amo de aceptar, estaba nerviosa pero a la vez feliz y esperando ese nuevo
encuentro con esa mujer y ver lo q sucedía después de eso.
By nereida.
Llega el día en q el Amo y su amiga también Ama quedan para
q la perra pase un tiempo con Ella tal y como había hablado la perra con su Amo
y después ver lo q sucede.
Su Amo la pasa a recoger con el coche a su casa para ir a
casa de su amiga, la cual vive a las afueras en un chalecito con un pequeño
terreno. La perra esta muy nerviosa por lo q la espera ya q desconoce q pasara
al igual q por lo q su cuerpo y su mente, su alma van a sentir, sabe q va a
sufrir en su interior muchas sensaciones desconocidas y nuevas para ella.
Por fin llegan, se saludan ambos Dominantes cordialmente y
en ese mismo momento la ordenan q se arrodille. Su Amo la coloca una cadena en
el collar q llevaba puesto ya q se lo puso nada mas entrar en el coche y como
gesto de entrega a la Ama le da la correa para q Ella la lleve y ya se haga
cargo de la perra en ese mismo momento.
Antes de dejarlas solas a las dos, la Ama invita a su amigo
a tomar unas cervezas y así poder pactar límites y quedar para el momento de la
recogida de su perra o si después de eso aceptara ser de los dos, ver q
condiciones se darían en esa situación. La primera orden de la nueva Ama de la
perra, después de desnudarla, es q le sirva de beber a ambos y se quede a modo
de mesa en medio de los dos para sostener las bebidas.
La temblaban las piernas por el hecho de estar nerviosa ya q
acababa de comenzar su nueva aventura pero además al llevar un tiempo a 4 patas
sosteniendo las bebidas sobre su cuerpo a modo de mesa eso hacia q aun temblara
mas por el mismo cansancio y la posición inquieta. Aparte de eso no se lo ponían
nada fácil, ya q de vez en cuando la iban torturando con caricias en sus
partes, pellizcos o juguetear la Ama con su pie en el coño de la perra. Con voz
firme y la mirada fría, la advirtió la Ama q ni se la ocurriera derramar nada
de lo q sostenía o lo pagaría caro, eso aun la ponía mas en tensión, la presión
q conllevaba el no saber como era esa Ama, porque lo arrepentiría de q manera
seria castigada, la hacia ponerse mas nerviosa aun.
Después de un momento de charla y haber tomado las cervezas
y descansado, su Amo se despidió de la perra con un par de cachetadas mientras
al oído la decía q no le dejara en evidencia y q esperaba de ella q estuviera a
la altura de lo q El y su amiga merecen y q a su vuelta quería una contestación
de lo q ella quería a partir de ese momento, pero q esperaba q se quedara con
El.
En cuanto el Amo salio por la puerta, la Ama cogió a la
perra de la correa y llevándola a cuatro patas la enseño brevemente la casa,
dejándola claro q en la habitación de Ella no podía entrar, se quedaría en la
puerta esperando si precisaba algo de Ella y se encontraba en la habitación.
También la explico q Ella tenia a gente a su cargo q en alguna ocasión también
se encontraban en la casa, si aceptaba quedarse con su Amo y con Ella, quizás
en algún momento coincidiera con sus sumisos, los cuales todos estaban a la
misma altura, aunque ella como nueva estaría por debajo de ellos, aparte q ella
tendría principalmente a su Amo como primer Dueño.
La llevo al jardín, en el q en un lateral había una caseta
de perro un comedero y bebedero, un poste y una jaula, además de haber un
barreño y al lado un buco y una manguera. La Ama la hizo saber q ese seria su hábitat,
según se portara durante el día, dormiría en la caseta o en la jaula, el
barreño era para bañarla y de igual manera si se portaba bien con el cubo y de
una manera mas delicada y sino simplemente con la manguera a presión. En el
comedero y bebedero tendría siempre lleno de ambas cosas, lo q tuviera de
comida dependía también de su comportamiento, podía ser desde sus sobras de la
comida, parte de la comida q se preparara para Ella o comida para perros.
El poste serviría para atarla ahí con la correa cuando no
quisiera q la molestara o simplemente la apeteciera tenerla ahí y así pensando
después de cada prueba q pasara.
La traviesa perra en ese momento era totalmente todo lo
contrario, estaba tan impactada de la dureza q desprendía su nueva Ama q no se
la pasaba por la cabeza el poder tener rebeldías, sino todo lo contrario
intentar asimilar y ver la manera de agradarla para no hacerla enfadar y así
poder recibir todos los mejores cuidados. Estaba claro, q ahora si q iba a ser
una autentica perra por lo menos así tenia la sensación de q se iba a sentir al
ver todo lo q la esperaba.
Ya se había hecho la hora de cenar y ya la había puesto mas
o menos al día de las normas, de como era la distribución de la casa, de cual
era su sitio, por lo tanto había q ponerse a preparar la cena. En ese momento,
la Ama cogió una barra separadora en la q en cada extremo había unos grilletes,
era para los tobillos y así poder mantener las piernas separadas, y a su vez la
cambio el collar por otro mas ancho y el cual tenia varias argollas para
enganchar cadenas o grilletes. En eso le puso unos grilletes de cuero en las
muñecas y estos los unió al collar mediante una cadena no muy larga pero lo
justo para q pudiera tener un poco de libertad de movimientos y así poder
preparar la cena y servírsela.
La ama disfrutaba muchísimo verla así, por lo patética q se
la veía a la perra a la vez de torpe ya q no sabia como moverse además de tener
dificultad para ello y lo mas gracioso iba a ser ver a la perra cocinar de esa
manera y después llevarlo hasta la mesa. Mientras la perra cocinaba la Ama se
sentó en un sillón desde el cual podía observar perfectamente a la perra en la
cocina. En una mesita al lado del sillón había una botella de vino tinto y una
copa del cual se iba sirviendo, un cenicero y de vez en cuando a la vez q bebía
de la copa fumaba algún cigarrito. Después de un rato fue llevando la cena a la
mesa y preparándola poniendo todo en su sitio para q su Ama se sentara a cenar,
había tardado un poco mas de la cuenta ya q la costo trabajo el aprender a
manejarse así aparte de ir lenta caminando ya q no podía tan apenas y menos
sino quería tirar nada al suelo. Se levanto la Ama del sillón para dirigirse a
la mesa y sentarse, atrajo a la perra hasta su lado y la hizo arrodillarse a su
vera, mientras la decía q según estuviera la cena, ella cenaría una cosa u otra
y de una manera u otra. Eso la desconcertó, ¿cenar de una manera u otra? ¿A q
se refería con eso? Su mente ya no paraba de imaginarse cosas y rezando para si
misma para q estuviera la cena del agrado de la Ama.
Cuando finalizo la Ama, se levanto de la mesa, salio al
jardín y cogió el comedero, echándola ahí las sobras q se había dejado en el
plato a la vez q la decía al a perra q no estaba mal del todo pero q podía ser
mejorable y para q lo pudiera ver la daba las sobras y así darse cuenta de lo q
podía mejorar. Como no esta tan mal la cena, comerás desatada, eso si a cuatro
patas, con la boca solamente sin ayuda de nada mas, como una perra q es lo q
eres, la dijo. La perra asintió con la cabeza y salio tras su Ama al jardín q
es donde estaban los comederos y donde volvió a depositar el q cogió para echar
la comida. Aun no hacia demasiado frió, además en esa zona del jardín estaba
semi-cerrada por un porche y con una pequeña lámpara de estufa, las q se ponen
en algunas terrazas de bares.
La perra estaba hambrienta y se lanzo enseguida al comedero
a por su comida, la daba igual q estuviera mejorable, necesitaba comer y beber
y así evadir sus pensamientos al concentrarse solo en como comer y no mancharse
demasiado. Estaba apunto de soltar alguna lagrima, echaba de menos a su Amo,
pero curiosamente para ella, también se notaba excitada y humedad en su coño,
la misma humillación q estaba viviendo, el hecho de sentirse y q la trataran
como una perra, eso aun la encelaba mas.
En el mismo momento q la Ama vio q estaba terminando de
cenar la perra la dijo q se limpiara si se había manchado con sus patas de
perra y después entrara a la casa, colocándose a cuatro patas delante del
sillón donde se había sentado mientras ella hacia la cena. La Ama fue un
momento al servicio y así mientras tanto daba tiempo a la perra a hacer lo q la
había ordenado. El sillón estaba girado en ese momento hacia la televisión, ya
q antes la Ama lo había girado hacia la cocina. Sale la Ama del servicio y se
sienta en el sillón poniendo sus pies sobre el cuerpo de la perra, a la vez la
dice q estará así hasta nueva orden, q es momento de q su Ama descanse y se
relaje y divierta viendo una película. Antes de ponerse con la película, la
pregunto a la perra si tenia alguna duda o algo q decirla, ya q durante la
película no quería ninguna interrupción y mas si era por alguna tontería. Había
algo q si quería preguntar, se le había escapado ese pequeño detalle a su Ama o
lo hizo aposta para q ella lo preguntara… esa era la duda q tenia la perra y se
dispuso a hacérsela saber a su Ama, q iba a pasar cuando tuviera q ir al
servicio, donde lo haría o como o si podía ir sin permiso…
La Ama al escuchar eso se echo a reír, era muy gracioso ver
como se sonrojaba la perra al plantearle ese caso y el q pudiera pensar q
podría ir cuando tuviera ganas aun la hacia mas gracia. “Cuando tengas
necesidad me darás con la pata en la pierna, así me pedirás siempre permiso
para hablar y dirigirte a mi, yo te daré permiso para hablar y me lo dirás, yo veré
si vas en ese momento o te hago esperar y el como lo harás lo veras en cada
momento, ¿esta claro perra?”. Esa fue la respuesta de la Ama, añadiendo q sino
estaba en casa Ella porque había salido por algún motivo, y tenia necesidad de ir
al servicio, como estaría atada en el poste en el jardín lo haría allí sino
pudiera aguantar a q volviera a casa y si se encontraba en la cama como no
podía entrar a su cuarto y por lo tanto no podría darle con la pata en la
pierna, lo haría dando con la pata en la puerta.
Un detalle q se me escapo comentar, mientras estuviera la
perra en esa casa iría en todo momento desnuda solo con collar o algún otro
utensilio q le pusiera su Ama y a cuatro patas, excepto para cocinar o servirlo
en la mesa q la permitiría levantarse aunque iría con limitaciones.
Nuestra pequeña perra estaba ya totalmente agotada había
pasado solo media hora con los pies de su Ama sobre ella pero la sensación para
la perra es q había pasado por lo menos 2h, estaba perdiendo totalmente la
noción del tiempo y su cabeza no paraba de pensar y preguntarse porque la
humillaba tanto el q pudiera ser tratada como una perra y usada como mueble y
eso la pusiera tan excitada. Había tenido momentos de pensar, me echaría a
correr y no pararía huyendo de aquí, pero hay algo q me retiene y no es una
cadena física.
La Ama noto a su perra con la mirada algo perdida, como si
estuviera distraída y la verdad era así, ya q estaba pensando y pensando en
como se sentía y en si quería seguir con ello o no, por eso la Ama para hacerla
reaccionar y despertar de los sueños a la perra, cogió un cigarro q se estaba
fumando y se lo apago en el culo a su perra. Del bote q pego esta, ya q no se
esperaba eso, además de q la quemo e hizo algo de daño tiro las piernas de su
Ama al suelo, cosa q la enfado mucho. Se levanto del sillón enfurecida y de una
patada la retiro a la perra mientras la decía “lamentaras lo q has hecho, no
deberías de haber estado distraída y menos haberte movido hasta el punto de
tirar mis piernas al suelo”. En un intento de remediar lo q había pasado sin
pensar q eso podría empeorar la situación la perra siguió a su Ama, ya q esta
salio de la habitación en la q estaban, a la par q la seguía y caminaba tras
Ella, iba suplicándola q no se lo tuviera en cuenta q no iba a volver a pasar y
se arrepentía mucho de ese error, no sabia q la había pasado para actuar de esa
manera. Esas suplicas a la Ama aun la produjeron mas enfado, no la había dado
permiso para moverse ni mucho menos dirigirse a Ella y no la servia q la fuera
suplicando clemencia.
La Ama llego a una habitación q estaba con la puerta cerrada
y el día q llego a esa casa la perra no la explico q había tras esa puerta. Era
una pequeña mazmorra, con poca decoración tan solo con utensilios de tortura,
en donde iba a recibir el castigo por el enfado q la había provocado instantes
antes. La ordeno q entrara a la habitación y se colocara cara a la cruz de San
Andrés q había justo en medio de la habitación. La ato a ella dejando frente a
su vista la espalda y trasero de la perra. En ese momento cogió un gato de
nueve colas y comenzó a aplicarle el castigo intercalando su espalda y culo a
la vez q la perra iba contando los azotes y dando las gracias a la vez. Después
de unos veinte latigazos la dio la vuelta y empezó a torturar su parte
delantera, poniéndole unas pinzas en los pezones unidos con una cadena y en
medio colgando unos pesos. Para hacerle mas difícil la tortura comenzó a jugar
la Ama con el coño de la perra para finalizar poniéndole pinzas con pesos
también en los labios de su coño. La dejo ahí durante unos minutos mientras
preparaba unos vibradores. La bajo de la cruz y la ato contra una mesa apoyando
sus tetas en la mesa y bien abierta de manos y piernas ya q se las ato a las
patas de la mesa la metió un plug anal por el culo y con un vibrador metido en
el coño de la perra la Ama comenzó a jugar metiéndolo y sacándoselo. Una de las
ordenes q tenia la perra era q bajo ningún concepto podía correrse sin su
permiso, si lo hacia se quedaría ahí atada hasta q decidiera desatarla y
dormiría metida dentro de la jaula con el plug y el vibrador dentro de sus
orificios.
Ya eran altas horas de la madrugada cuando termino el
castigo, la perra se lo había callado pero la Ama se dio cuenta q se había
corrido una vez sin su permiso, aunque no la dijo nada en el momento, la desato
sin dejarla tiempo ahí atada sola pero sin mediar palabra la metió en la jaula
con el plug y el vibrador dentro de si, entonces la perra se dio cuenta de q su
Ama se había dado cuenta de q la había desobedecido y debía pagar por ello
durmiendo así.
A la mañana siguiente la saco de la jaula y con la manguera
q había en el jardín lavo a la perra con agua mas bien tirando a fría. El
cuerpo de la perra reacciono al momento poniéndose sus pezones duros como
piedras, pero sin atreverse a mediar palabra se puso frente a su Ama al
terminar de lavarla, de rodillas y bajando la cabeza a los pies de la Ama la pidió
así besarla los pies, lo cual esta acepto ese gesto y la acerco sus pies para q
lo hiciera. Era una manera de pedir disculpas la perra por lo sucedido la noche
anterior sin ir suplicándola y empeorar las cosas.
La Ama salio un momento a hacer unas cosas, pero antes dejo
a la perra atada con la correa al poste y con un hueso de plástico a su lado
para q se entretuviera jugando con el mientras Ella estaba fuera.
La perra no pudo aguantar a q su Ama volviera por lo q tuvo
q mear en un pequeño rincón dentro del margen q le daba la cadena para moverse.
Ella no se había dado cuenta, estaba más preocupada y metida en su humillación
mientras hacia sus necesidades, q ver si había llegado su Ama, la cual llego
justo para ver a la perra haciendo sus necesidades. Una carcajada de la Ama la
hizo reaccionar y darse cuenta q había llegado en ese mismo momento la perra se
sonrojo y se puso roja como un tomate llena de vergüenza y humillación.
La desato y poniéndola de nuevo las manos atadas al collar y
el separador de piernas la ordeno q fuera preparando la comida y por su bien
esperaba q estuviera mejor q la cena. La perra se esforzó todo lo q pudo en
hacerla lo mejor posible, ahora si q estaba segura q lo había hecho perfecto y
esperaba q fuera de agrado de la Ama y así fue, por lo q no comió restos sino
su parte de la comida ya q había hecho ración para las dos y como premio la
dejo comer en la mesa a su lado, eso si, sin usar cubiertos, con la boca, como
una perra eso no había cambiado.
Por la tarde llego su Amo de sorpresa para la perra ya q
pensaba q iba a tardar mas en ir a por ella, pero este había llamado a la Ama
cuando salio por la mañana para decir q iría esa tarde. Al verlo entrar por la
puerta no sabia si tirarse a los pies de El, quedarse de rodillas al lado de la
Ama o salir corriendo de allí al jardín el cual se había convertido en su pequeño
hábitat y en la q se sentía medio protegido. Se quedo quieta, esperando
ordenes, y la primera orden fue q preparara café y pastas y lo sirviera en una
mesita del porche del jardín. El Amo reflejo ante la perra indiferencia, quería
hacerla sufrir un poco mas ponerla al limite para así presionarla mas en su
decisión y q fuera mas real, con lo q ella deseara mas. Estaban los dos Amos
sentados en la mesa cuando la perra sirvió el café y las pastas y entonces el
Amo de la perra como agradecimiento le toco la cabeza a su perra y la ofreció
una galleta poniéndosela en la boca.
En esto la preguntaron como se sentía y q tenía pensado
hacer a partir de entonces, el Amo ya sabía todo lo sucedido, ya lo había
puesto al día la Ama mientras la perra preparaba el café. Por un instante la
perra se quedo callada no sabia q decir ni como articular palabra ni mucho
menos tenia aun clara la decisión, estaba echa un mar de dudas. Trago saliva y
comenzó a explicar sus sentimientos, los cuales en los últimos días, semanas habían
cambiado pero si tenia mas o menos claro, q quería ser de los dos, ambos se
complementaban y la complementaban a ella, era diferente la doma de uno u otro
y no podía elegir entre ninguno, quería a los dos, pero siendo fiel a quien
pertenecía primero. Aunque reconocía q la había gustado mucho la experiencia
con la Ama, ya q había sentido cosas q nunca había sentido y aun siendo muy
dura, era lo q ella necesitaba, deseaba ser la mejor perra y gracias a ambos,
estaba cambiando y conseguir mejorar para ser la mejor.
Fin.
By nereida.
(Sí te soy sincera se me ha hecho corto y pensé que habría una cuarta parte), jajajaja.
ResponderEliminarAún así, una vez más muestras que cuándo te propones a hacer algo, lo consigues.
¡Felicidades! y te envío una "Rosa"
Vive de instante en instante, porque eso es la vida.:)
ResponderEliminarAmaDelMar
Una buena escritora debe saber escribir de todo al igual q debe saber mantener al lector con esa intriga y esas ganas de querer leer y saber mas de la historia.
ResponderEliminarnereida.